Dulce tormento
Dulce Ramirez
December 2022
Mi nombre es Dulce Maria y jamás creí que sería un dilema tener ese nombre. Cuando era una niña llegué a pensar en cambiarlo cuando fuera adulta porque nunca me sentí como si fuera un nombre real. Yo quería tener un nombre como Sofía, Paulina, Alejandra, no sé, un nombre de verdad porque para mí Dulce significaba un caramelo. Toda mi vida he recibido comentarios como “¿Dulce, me das un dulce?”, “¿Dulce, eres dulce o eres amarga?” o “¿Dulce porque eres tan dulce?”. Cuando tenía ocho años decidí preguntarle a mi mamá el significado de mi nombre. Ella es de religión católica; cuando estaba embarazada de mí un día estaba leyendo una oración y había una frase que decía “ dulce nombre de Maria”, y en ese momento le prometió a la virgen Maria que si yo nacía niña en agradecimiento me llamaría Dulce Maria. Cabe mencionar que el doctor le dijo que yo sería niño. Cuando supe el significado del porque mi mamá decidió ponerme Dulce Maria, le tomé cariño a mi nombre. Aún no me gusta que me digan Maria y casi nadie sabe que me llamo Maria. Jamás entenderé porque la gente se ríe cuando les digo mi segundo nombre, si es un nombre muy bonito. Cuando me vine a estudiar en los Estados Unidos, opté por solo escribir mi nombre como Dulce Ramirez y evitar el de Maria. Aún así me siguen poniendo apodos como, dulcefina, dulcela, dulcerella, dulcería o caramelo. En inglés es aún más complicado para las personas que no hablan nada de español porque la pronunciación nunca es correcta y a veces prefieren solo decirme candy. Mi profesora de italiano llegó a nombrarme Dolce y entre risas decirme Dolce & Gabbana. En fin, será un nombre que no importan los años que pasen: siempre tendrán algo que decir. Actualmente, lo que antes era un tormento para mí, ya no lo es porque ahora solo lo tomo con buen humor. Sí, soy Dulce, una persona muy dulce.